Cómo hacer un reloj de arena

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Dicen que el tiempo fue un invento del hombre, pero ya en estos días eso da igual; lo cierto es que necesitamos del tiempo para realizar la mayoría de nuestras actividades.

Algunas veces necesitamos calcular el tiempo para realizar ciertas tareas, como el tiempo que tomamos en preparar una comida, hablar por teléfono, ordenar la habitación, hacer una tarea, resolver un crucigrama, un acertijo, entre otros.

Por ello, ¿qué mejor manera de calcular nuestro tiempo que con un divertido reloj de arena construido por nosotros mismos? Hacerlo será mucho más rápido de lo que podamos imaginar.

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Procedimiento para hacer un reloj de arena en casa

Materiales

• Arena seca
• 2 botellas de plástico transparente
• Purpurina
• Clavo y martillo
• Taladro
• Brillantina
• Cinta adhesiva
• Pegamento
• Cronómetro
• Cúter
• Cartulina
• Clavijas de madera
• Pintura acrílica
• Calcomanías

 

Pasos detallados para el reloj de arena

A continuación, te presentaremos los pasos detallados para construir un reloj de arena en casa.

Paso 1

Necesitamos tener a mano dos botellas plásticas que sean transparentes. Estas botellas deben ser del mismo tipo. No pueden ser de tamaños distintos, ni tener formas diferentes tampoco. Si logramos que sean cortas, entonces el reloj tendrá mayor estabilidad. Si lo deseas, puede buscas botellas que tengan formas de bombillas, para que el reloj se vea más impresionante. Pueden ser botellas de orangina, por ejemplo.

Paso 2

Debemos remover cualquier etiqueta que tenga la botella. Esto lo haremos con un poco de jabón y agua tibia, ya que de esta forma cualquier otra impureza también será removida. La limpieza de las botellas es muy importante. Luego de hacer esto será necesario limpiar ambas botellas con un poco de alcohol isopropílico.

 

Paso 3

En la parte superior de una tapa colocaremos pegamento y adheriremos la otra. Ambas tapas deben estar pegadas y luego se espera que el pegamento se seque. Es importante que el centro de las tapas esté libre de pegamento porque en ese punto haremos luego un agujero. Las superficies de las dos tapas deben hacer contacto, y lo que debe quedar visible será el interior de ellas. Debemos usar un pegamento que sea resistente, tal como epoxi o superpegamento. Si usamos pega escolar no resistirá nuestra pieza.

Paso 4

Luego debemos hacer un agujero en el medio de las tapas que hemos pegado. Para hacer este agujero tenemos dos opciones, o usamos el martillo con un clavo, o un taladro. Ahora, este agujero debemos hacerlo tan gran o tan pequeño como nosotros lo deseemos, considerando que si es muy grande la arena caerá más deprisa, y si es pequeño entonces será lenta la caída. Si la tapa de las botellas que tienes en tus manos, tienen unos pequeños discos plásticos adentro, entonces tendrás que removerlos primero con un destornillador pequeño para extraerlo y que no dificulte la prefiguración para hacer el agujero.

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Paso 5

Una de las tapas debe enroscarse en la botella, tal como lo hacemos normalmente. No debemos sentirnos extrañados porque en realidad quedará otra tapa de forma muy extraña encima de la tapa que hemos enroscado, pero luego nos encargaremos de ella.

 

Paso 6:

La arena que usemos debe estar seca, sino no correrá con facilidad. Las botellas también deben estar secas en su interior. Si compramos la arena, entonces la podemos dejar al sol durante una hora, esparcida sobre una bandeja para que se seque lo suficiente. Si visitamos una tienda donde venden materiales para hacer manualidades podremos encontrar arena de colores, y también la puedes usar si lo prefieres. Otra gran idea que puedes aplicar es mezclar un poco de arena con purpurina en tono dorado. Ambas lucen geniales y nuestro reloj de arena parecerá mágico.

 

Paso 7:

Procedemos a llenar la segunda botella con la arena. Si no deseas que tu reloj se vacíe rápidamente, puedes llenar la botella tomando la medida de dos tercios, y si quieres que tu reloj tenga un tiempo en específico puedes ir calculando esta medida con un cronómetro. Solo necesitas tomar el tiempo que te toma llenar la botella. Es decir, si deseas que tu reloj tenga una duración de un minuto, entonces llena la botella por este tiempo, un minuto.

 

Paso 8:

Ahora también debemos enroscar la botella que se encuentra vacía a la botella que ya está llena. La botella con la arena la colocamos sobre la mesa y volteamos la vacía. La colocamos hacia abajo. Debemos alinear bien las tapas, de forma que todo quede bien sellado.

 

Paso 9:

Este paso será el de la prueba decisiva. Debemos darle la vuelta a nuestro reloj y dejarlo hacia abajo. Lo que debería ocurrir es que la arena debería pasar de una botella a otra sin ningún impedimento. Puedes volver a tomar el cronómetro y medir el tiempo a ver si tiene la duración que deseas.

 

Vídeo Completo para aprender a hacer un reloj de Arena Casero

 

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Al momento de manipular el reloj, el pegamento en principio no les dará mucha estabilidad a las botellas, así que tendremos que sostenerlo por el cuello. Sin embargo, esto también será positivo porque estaremos calibrando nuestro reloj y luego podremos ajustarlo mejor.

Si observamos que se vacía muy rápido, podemos agregar más arena, o quitar en caso de que se demore demasiado. Luego de haber hecho esto uniremos las botellas nuevamente por las tapas.

Ahora que nuestro reloj si está ajustado como lo queremos y tiene el tiempo exacto que deseamos, le daremos más seguridad en el cuello. Para ello, le agregaremos un poco de cinta adhesiva por donde se unen. Los dos cuellos deben ser ajustados, y podemos dar tantas vueltas a la cinta como sea necesario. Comenzaremos por el cuello de abajo hasta ir subiendo.

Ahora, nuestro reloj de arena estará listo. Podemos girarlo y cuando esté vacía la botella superior, entonces podremos dar nuevas vueltas y continuar haciendo nuestras mediciones.

Luego queda solo decorar y para hacerlo necesitaremos de nuestra imaginación, pegamento y calcomanías o piedras, o cualquier otro detalle que deseemos. Esto dependerá de nuestra creatividad, pero nuestro reloj de arena ya está listo para ser usado, o para decorarlo y hacerlo llamativo.

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